Cuando se aproxima el día
del romanticismo por antonomasia, se pueden
observar todos los comercios con decoraciones rojas de corazones y sus
productos posibles regalos de San Valentín.
La festividad de San Valentín se remonta al siglo III, un obispo de Terni que,
según la leyenda, fue encarcelado por celebrar matrimonios cristianos. Y aunque
a mí, personalmente, me parece una fecha "puramente comercial" y que
las cosas se demuestran día tras día, es difícil dejar pasar esta fecha sin un
pequeño detalle personal hacía la persona que me regala cada día su corazoncete, por eso mismo, he decidido dejar esta entrada:
Me gustaría escribirte el
texto más bonito que hayas leído nunca, contándote lo importante que eres para
mi, contándote en él, todo lo que has despertado en mí y cada momento especial
que me has hecho pasar a tu lado. Pero me pongo a escribir y todo lo que pueda
decir se queda demasiado pequeño.
Sin duda, en ese texto
empezaría dándote las GRACIAS, de todo corazón por haberme hecho tan feliz, por
darme todo el cariño del mundo, por cuidarme y protegerme. Gracias por haberme
sacado cada sonrisa, por haberme hecho reír como una tonta, por haber
antepuesto mi felicidad a la tuya y por haberme hecho sentir la persona más
especial del mundo a tu lado.
Continuaría diciéndote, que
me enganché a cada una de tus caricias y sonrisas, a tu mirada, como no a cada
uno de tus besos, a esa forma especial de tratarme, a esos ojitos y a tu manera
de hacerme sentir única y especial.
Acabaría diciéndote que sí,
que lo reconozco, que has pasado a ser mi única adicción. Sin apenas darme
cuenta me fui haciendo adicta a esa carcajada que soltamos cuando nos reímos el
uno del otro por una simple tontería y a cada uno de esos abrazos de los que
nunca deseo soltarme. Adicta a cada momento que paso a tu lado y a cada sonrisa
tuya que me regalas.
Por último, me gustaría
recordarte lo especial e importante que eres para mí, y mi deseo es estar a tu
lado el resto de mi vida.
En ti, encontré la pieza que me faltaba para
ser realmente feliz.
...y vosotros, ¿celebráis San Valentin? ¡Contadme!